domingo, 25 de septiembre de 2011

Todo se lo lleva el viento.

Aprendí que los amores pueden terminar en una noche. Que grandes amigos pueden volverse grandes desconocidos. Que desconocidos pueden volverse mejores amigos. Que nunca terminamos de conocer a una persona. Que el "nunca más" nunca se cumple y que el para siempre, siempre termina.

No hay comentarios:

Publicar un comentario